Silencio

Días cuya jornada es agotante,

caminos que parecen interminables,

sonrisas escondidas en el tiempo,

dolor, sufrimiento y tormento.

¿Acaso te encontraré en el silencio,

en esos lugares que parecen olvidados,

pero son el reflejo de nuestros sueños

y la pereza de nuestros pasos cansados?

¿Serás tú ese ángel que mi alma cuida

que con sus sonrisas me acaricia

y en el silencio me devuelve a la vida

en medio de tanta y tanta ironía?

Devuélveme las fuerzas para luchar

y regálame una sonrisa al despertar;

envuélveme con tu mano sincera

entrégame de nuevo a mi tierra.

Valor propio

La autoestima es el valor propio; es la forma en que nos percibimos a nosotros mismos. De esto depende nuestras decisiones. En ocasiones el ser humano no puede asimilar que los motivos mayores de la depresión se encuentran en el valor que nos damos a nosotros mismos. ¿En qué lugar nos encontramos en la escala de prioridades de nuestras propias vidas? ¿Podría ser que nos encontremos en el último lugar? Muchas personas toman decisiones basadas en la satisfacción de otros, en el bienestar y la felicidad de los demás y ni siquiera toman en consideración sus propias necesidades. Otras veces dicen amar a quienes le rodean cuando no pueden ni siquiera amarse a sí mismos respetando su cuerpo, sus propios valores. Si díficil es tomar decisiones, más difícil es comprender la manera correcta de tomarlas. Como seres humanos sensibles, dejamos que factores externos afecten en esta difícil tarea, no podemos visualizar la realidad con claridad y en ocasiones decidimos por impulsos. Es importante aclarar nuestras mentes y establecer una nueva escala en la lista de nuestras prioridades. Tenemos que analizarnos emocionalmente, tenemos que limpiar nuestro ser de prejuicios, de rutinas, de sentimientos arraigados que se apoderen de nuestra mente. Tenemos que empezar a amarnos para poder compartir amor. No podemos ayudar a otros cuando nosotros mismos nos sentimos en el piso. Es muy difícil salir del abismo donde nosotros mismos hemos decidido colocarnos. Es muy difícil sonreír cuando nosotros hemos apagado las ilusiones y las esperanzas de nuestras vidas. Hoy es un buen día para reflexionar. Hoy es un buen día para elegir ser felices. Despierta, levántate y resurge. Aprende a disfrutar cada segundo de tu vida y no olvides que cada vivencia depende de las decisiones que hayas decidido tomar. Decisiones que son tuyas y que el efecto será en tu vida. No permitas que tus emociones manipulen tus pensamientos. Camina con la seguridad de que eres importante.