Hoy y siempre he de volver
al jardín que me vio crecer,
y en un hermoso amanecer
mis memorias se harán ver.
Entonces dejaré de ser historia
para convertirme en ese presente
que no quiere ninguna gloria
solo en tu vida no estar ausente.
Hoy, miraré al cielo desde mi jardín,
y escribiré allí con el lapiz de la eternidad
los sentimientos que me permiten vivir
bellos momentos cargados de libertad.
Hoy no pediré lapices prestados,
ni ideas para poder comenzar
le daré a la musa su espacio
para que empiece a crear.
Entiendo de tristezas, de soledades,
de caminos inciertos, de verdades,
de momentos al viento, de tempestades,
pero hoy quiero del mundo las bondades.
Las horas pasan tan deprisa,
y solo quiero poder deternerlas,
escribirle sin temor a la vida
para luego poder entenderla.
Entender los caminos abiertos
y los que sin querer se han cerrado,
poder descubrir lo que es incierto
en cada sendero transitado.
Hoy quiero dejar de ser ausencia
y poemas en algún lugar guardados,
solo quiero sentirme presencia
en un mundo que el dolor ha marcado.
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